LA CULTURA EXPANDIDA EN SALMANCA
Cuando un viajero viene a la ciudad de Salamanca lo hace atraído por la reconocida monumentalidad de la ciudad y la belleza de su entorno. El viajero sabe que viene a una ciudad con un enorme legado cultural en el que la arquitectura es su máximo exponente. Lo que desconoce es que ese aspecto cultural tiene una continuidad más allá de sus murallas, en sus alrededores. A pocos kilómetros de la ciudad la riqueza cultural salmantina se sigue expandiendo, como si se tratara de un fenómeno que, más allá de su epicentro, tiene réplicas en otros municipios de la provincia próximos a la ciudad. Lo interesante es que esas réplicas tienen una naturaleza estética distinta que complementa la oferta de la ciudad.
Para quienes aspiran a tener una visión más amplia de la cultura de este entorno, les proponemos excursiones a localidades colindantes de la ciudad donde se sorprenderán al encontrar interesantes manifestaciones artísticas, más allá de la arquitectura.
Estas propuestas tienen que ver con las prácticas artísticas contemporáneas, con la creación plástica a través de la pintura, la escultura, la obra gráfica o las instalaciones.
La indiscutible influencia de una ciudad con un poderoso patrimonio cultural, ha tenido la lógica consecuencia del surgimiento, en unos casos, y el asentamiento en otros, de artistas plásticos que también han dejado su huella permanente con sus obras.
La presencia, siempre viva, de la sensibilidad de otros momentos del pasado han tenido una interesante respuesta en el contexto social contemporáneo de los artistas que viven y habitan en este entorno.
Esto ha generado la consolidación de una serie de museos, espacios públicos y entornos naturales en los que se pueden ver numerosas y variadas propuestas artísticas. Se ha producido un diálogo entre la oferta cultural de la ciudad y otros lugares de la provincia. Este diálogo se establece desde el más alto nivel cultural, lo que aporta al visitante una visión más intensa y compleja de la importancia de lo estético a través de diversas formas de creación.
El respeto y admiración hacia el pasado artístico de Salamanca ha constituido un gran estímulo y a la vez un desafío para estos creadores en su búsqueda de una sensibilidad contemporánea que refleje las nuevas inquietudes artísticas a través de otras formas de manifestarlas.
La sensibilidad y estética contemporánea que el viajero puede encontrar en las poblaciones periféricas de Salamanca, le dan una visión completa de la singularidad de un lugar, de su creatividad y de su generosidad para compartirla con quienes, atraídos por la cultura, se van a sorprender por lo inesperado de lo nuevo.
Estas manifestaciones artísticas las podemos encontrar en varios lugares próximos a la ciudad que pueden recorrerse haciendo una itinerancia de un día.
Proponemos un paseo cultural, ameno y estimulante, en el que cada lugar aportará nuevas sorpresas al visitante.
Nos referimos a lugares como el municipio de Santa Marta de Tormes, donde se encuentra el Museo de Arte Contemporáneo del Ayuntamiento y que muestra numerosas obras de artistas nacionales e internacionales del siglo XX y XXI y un gran número de creadores castellano-leoneses.
Espacio sorprendente es el Cementerio de Arte, en Morille, que nos ofrece una visión quimérica y apocalíptica sobre el fin del arte contemporáneo, desafiando a la historia y a la idea de eternidad de la obra de arte.
Destacamos también el Arte emboscado de Almenara de Tormes y la Isla del Soto de Santa Marta de Tormes, donde plantas y animales crecen como por arte de magia y adquieren grandes dimensiones escultóricas integrándose con el entorno natural.
En el municipio de Doñinos podemos visitar la Fundación Ángel Mateos, un espacio donde contemplar la obra de este artista salmantino que eligió la escultura como medio de creación, desde una dimensión monumental y con una visión abstracta muy genuina.
Por último, el Museo Severiano Grande, en Mozárbez, nos ofrece la obra de este gran escultor vanguardista que desarrolló sus interesantes creaciones en medios tan atractivos y variados como el mármol, el granito o la madera.
Como podemos ver, la oferta cultural salmantina no termina en la ciudad, si no que se expande como el río Tormes por multitud de lugares y parajes de gran interés para ese viajero curioso e interesado por el arte y la cultura.